1. Horno cerámico orientalizante de Cerro de los Infantes, Pinos Puente (Granada), donde se fabricaron ánforas de formas fenicias y, posiblemente, otros tipos cerámicos durante los siglos VII/VI a.C.
Las variedades cerámicas que se han elegido para esta investigación son muy diferenciadas, tratando de mostrar un espectro lo más amplio de las producciones cerámicas que existieron, aunque podemos adelantar la presencia de elementos de engobe rojo (platos/jarros), cerámicas lisas de las que se emplearon para la fabricación de ánforas, así como elementos de la arcilla arenosa, más conocida como componente en la realización de las ampollas. Aunque tampoco se han olvidado algún que otro ejemplar de la vajilla policroma y de la compacta.
2. Cerro de los Infantes. Fragmento de cuenco-trípode de cerámica compacta oxidante que presenta restos superficiales de bandas pintadas sobre el borde. Se trata de un hallazgo superficial en los alrededores del horno. (© Juan A. Pachón).
Pero, en esta ocasión querríamos referirnos precisamente a este particular y último caso de las cerámicas compactas, empleadas en distintos vasos, pero cuyas más significativas realizaciones alfareras fueron los cuencos-trípodes (tripod bowls), a los que ya dedicamos un estudio monográfico:
(http://independent.academia.edu/JuanAntonioPach%C3%B3nRomero/Papers/1413225/Un_elemento_concreto_de_la_cultura_material_orientalizante_en_el_Mediodia_Peninsular_los_cuencos_tripodes_hallados_en_el_interior_de_la_provincia_de_Granada):
Aquí solo ilustramos dos de los ejemplares procedentes del Cerro de los Infantes (figuras 2/3), que nos ha permitido hacer una revisión de su representación gráfica para esta ocasión. Su importancia es doble: por un lado, su hallazgo, aunque superficial, coincide con el área en que se excavó después el horno de alfarero orientalizante [CONTRERAS, F., CARRIÓN, F. y JABALOY, Mª E. (1983): “Un horno de alfarero protohistórico en el Cerro de los Infantes (Pinos Puente, Granada)”, XVI Congreso Nacional de Arqueología, Zaragoza, 1983, pp. 533-539] que mostramos más arriba y que hoy ha desaparecido (figura 1) por la presión urbanística. Por otro lado, la directa relación entre estos trípodes y el horno podría permitir la fácil deducción de que pudieron haberse fabricado en este yacimiento de la Vega de Granada, rompiendo con la casi imperante opinión de que estas vasijas siempre fueron de factura fenicia.
3. Cerro de los Infantes. Fragmento de cuenco-trípode de cerámica gris. Hallazgo superficial en los alrededores del horno. (© Juan A. Pachón).
En este sentido, el segundo de los trípodes que hemos traído a colación se realizó en cerámica gris (figura 3), por lo que cabe asociarlo a ese amplio grupo de producciones horneadas en ambientes de reducción y que, durante mucho tiempo, se habían venido considerando como productos locales que fueron los primeros en suplantar las tradicionales vajillas a mano de pastas negruzcas, propias de las sociedades autóctonas con las que contactó el mundo fenicio.
Hoy sabemos que en las zonas costeras mediterráneas de colonización fenicia, ya fabricaban productos en arcilla gris, probablemente orientados al mercado del interior peninsular, como probarían ciertos alfares de la zona de Torre del Mar [MARTÍN CÓRDOBA, E., RAMÍREZ SÁNCHEZ, J. D. y RECIO RUIZ, Á. (2006): "Producción alfarera fenicio-púnica en la costa de Vélez-Málaga (siglosVIII-Va.C.)", Tiempos de púrpura. Málaga antigua y antigüedades hispanas (I). Mainake XXVIII, pp. 257-287].
(http://independent.academia.edu/JuanAntonioPach%C3%B3nRomero/Papers/1413225/Un_elemento_concreto_de_la_cultura_material_orientalizante_en_el_Mediodia_Peninsular_los_cuencos_tripodes_hallados_en_el_interior_de_la_provincia_de_Granada):
Aquí solo ilustramos dos de los ejemplares procedentes del Cerro de los Infantes (figuras 2/3), que nos ha permitido hacer una revisión de su representación gráfica para esta ocasión. Su importancia es doble: por un lado, su hallazgo, aunque superficial, coincide con el área en que se excavó después el horno de alfarero orientalizante [CONTRERAS, F., CARRIÓN, F. y JABALOY, Mª E. (1983): “Un horno de alfarero protohistórico en el Cerro de los Infantes (Pinos Puente, Granada)”, XVI Congreso Nacional de Arqueología, Zaragoza, 1983, pp. 533-539] que mostramos más arriba y que hoy ha desaparecido (figura 1) por la presión urbanística. Por otro lado, la directa relación entre estos trípodes y el horno podría permitir la fácil deducción de que pudieron haberse fabricado en este yacimiento de la Vega de Granada, rompiendo con la casi imperante opinión de que estas vasijas siempre fueron de factura fenicia.
3. Cerro de los Infantes. Fragmento de cuenco-trípode de cerámica gris. Hallazgo superficial en los alrededores del horno. (© Juan A. Pachón).
En este sentido, el segundo de los trípodes que hemos traído a colación se realizó en cerámica gris (figura 3), por lo que cabe asociarlo a ese amplio grupo de producciones horneadas en ambientes de reducción y que, durante mucho tiempo, se habían venido considerando como productos locales que fueron los primeros en suplantar las tradicionales vajillas a mano de pastas negruzcas, propias de las sociedades autóctonas con las que contactó el mundo fenicio.
Hoy sabemos que en las zonas costeras mediterráneas de colonización fenicia, ya fabricaban productos en arcilla gris, probablemente orientados al mercado del interior peninsular, como probarían ciertos alfares de la zona de Torre del Mar [MARTÍN CÓRDOBA, E., RAMÍREZ SÁNCHEZ, J. D. y RECIO RUIZ, Á. (2006): "Producción alfarera fenicio-púnica en la costa de Vélez-Málaga (siglosVIII-Va.C.)", Tiempos de púrpura. Málaga antigua y antigüedades hispanas (I). Mainake XXVIII, pp. 257-287].
Por eso, los análisis de las cerámicas fenicias recuperadas en el interior de esta parte del territorio peninsular, por primera vez, podrían empezar a arrojar luz sobre su verdadera identidad, el origen de los centros de producción, la naturaleza de sus arcillas, la procedencia de las mismas y, en definitiva, el auténtico valor de los intercambios comerciales de época protohistórica entre los colonizadores fenicios y los pueblos indígenas. Estaremos a la espera de que empiecen a fluir los resultados de esos estudios analíticos.
